Fabricar los envases que se usan para el vino

Pregunta: Tenemos una sociedad anónima privada, y sus acciones se dividen de la siguiente manera: 1 - 20% por el lado jordano. 2 - 40% por el lado saudí. 3 - 40% por el lado americano. Su capital es de más de treinta millones de dólares, y la producción empezó desde julio del año 1995. Hay más que 150 empleados jordanos que trabajan en esta sociedad, y la sociedad envió a veinte ingenieros de entre ellos a los Estados Unidos para obtener experiencia en esta industria. ( Número del tomo 22; Página 102)  La fábrica se dedica a producir los envases de aluminio de los refrescos, donde preparamos el envase, en el que se pone, con horno eléctrico, el nombre del contenido que se pondría en él por parte de las empresas que tratan con nosotros. Nuestra capacidad productiva llega a cuatrocientos millones de envases por año, de los que 150 millones se venden en Jordania a las empresas de Pepsi Cola y Coca-Cola. El resto se exporta a los países árabes vecinos, y también a países de Europa occidental y oriental según los pedidos que se hacen a la empresa madre en los Estados Unidos. Así, hemos recibido el encargo de fabricar treinta millones de envases de Vodka, que es una bebida embriagante. Nosotros fabricamos sólo los envases, exactamente como se fabrica la lata del zumo, que se envían a Rusia para embalarlas y ponerles las tapas que se fabrican por otras empresas; luego, ellos se encargan de venderlos en sus mercados. ( Número del tomo 22; Página 103)  Nuestra pregunta es: ¿Hay algún pecado o alguna sospecha en llevar a cabo esta fabricación por parte de los obreros, teniendo en cuenta que sólo el 10% es el que se dedica a las bebidas embriagantes, y el resto -90%- a las empresas que venden refrescos como Pepsi Cola y Coca-Cola? Cabe señalar que la fábrica funciona de forma automática, pues las placas de aluminio se meten por un lado y salen latas por el otro lado, impreso en ellas el nombre del contenido según los pedidos. Algunos obreros rechazan efectuar esa tarea, lo que conduce a interrumpir el trabajo y privar a los accionistas del ingreso y de la producción; además de ponernos en situaciones críticas ante nuestros copartícipes saudíes y americanos quienes poseen la mayor parte de esta fábrica. Téngase en cuenta que estas solicitudes son estacionales y a veces no se envían a nuestra fábrica, y quizá construyan otra fábrica en sus países y entonces este tipo de producción no se necesite. Aconséjennos, ¡que Allah les concede la mejor recompensa!