Cuando un musulmán contradice un veredicto establecido por un texto explícito
Pregunta: En nuestra región Pattani en el sur de Tailandia
( Número del tomo 2; Página 32) hay grandes problemas relativos a la preparación de una comida colectiva por la familia del fallecido. Le rogamos a su eminencia que nos den una respuesta al respecto y a lo que sigue: Los veredictos religiosos conocidos son los siguientes: obligatorio (wagib), recomendado (mandub), permitido (ga'iz), reprensible (makruh), y prohibido (mahzhur) Cuál es el veredicto legal acerca del que niega las reglas precitadas diciendo: 1 - Del obligatorio que es recomendado, permitido, reprensible o prohibido. 2 - Del recomendado que es obligatorio, permitido, reprensible o prohibido. 3 - Del permitido que es obligatorio, recomendado, reprensible o prohibido. 4 - Del reprensible que es obligatorio, recomendado, permitido o prohibido. 5 - Del prohibido que es obligatorio, recomendado, permitido o reprensible. (
Número del tomo 2;
Página 33) A modo de ejemplo, los sabios dijeron: "Es reprensible que la familia del difunto prepare una comida [y convidar a la gente para comerla], porque esto está legislado en la ocasiones de alegría, y no en las penas, y es una innovación religiosa repugnante", y dijeron "es reprensible preparar una comida [y convidar a la gente para comerla] el primer día, el segundo, el tercero o después de una semana. y dijeron también: "los cuatro imanes convinieron la reprensión de que la familia del difunto prepare una comida a la cual convida a la gente". Y las demás palabras de los ulemas respecto al tema. Muchos son los ulemas de nuestra región de
Pattani
que dicen lo contrario de lo que dijeron los antiguos ulemas. Algunos de ellos dicen que esto es un acto de Sunna, otros dicen que es permitido y poco de ellos dicen que es obligatorio. En cuanto a nosotros: Al-Hag
‘Abdullah Al-Hag Muhammad Salih,
Al-Hag
‘Abd Al-Rahman ibn Gafakya y yo
decimos como dijeron los antiguos ulemas. Debido a este problema, la gente se acusa de incrédulos, unos a otros, algunos no comen del animal sacrificado por otros, y no se casan entre ellos. Por ello, les ruego a su eminencia respondernos al respecto por una fatwa escrita en la cual se puede basar, con el fin de imprimirla y distribuirla a toda la gente gratuitamente si Allah -Glorificado sea- lo quiere.
Respuesta: Primero: La Sunna auténtica indicó que otra gente, fuera de la familia del difunto, son los que preparan comida y se la envían a la familia del difunto, con el fin de ayudarles y consolarles porque puede ser que estén demasiado ocupados por la defunción y por las visitas que reciben de preparar su propia comida. En
efecto
Abu Dawud
en su Sunan
según
‘Abdullah ibn Ga‘far
dijo: "cuando llegó la noticia del asesinato de Ga`far
Ga‘far
-que Allah esté complacido con él-, el Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- dijo:
preparad para la familia de
los Ga‘far
una comida porque están preocupados por lo que les ha sobrevenido
Recopilado por
Ahmad,
Abu Dawud,
(
Número del tomo 2;
Página 34)
Al-Tirmidhi,
Ibn Magah,
y Al-Tirmidhi lo calificó como Hadith aceptable (hasan).
En cuanto al hecho de que la familia del difunto prepare una comida para la gente y que se tome esto como costumbre, no es una cosa conocida, que sepamos, del Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- y tampoco de sus Califas Ejemplares, sino es una innovación y práctica no admitida de la que hay que abstenerse. Porque, esto ocupa a la familia del difunto más de su preocupación. Además, esto evoca las costumbres de la gente de la época pre-islámica y el alejamiento de la Sunna del Mensajero de Allah -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- y de sus Califas bien guiados -que Allah esté complacido con ellos-. El Imam
Ahmed
narró,
según
Garir ibn ‘Abdullah Al-Bagali
que los Compañeros -que Allah esté complacido con ellos- consideraban el hecho de que la gente se reúna en la casa de los allegados del difunto y que estos últimos preparen una comida para los que les visitan después del entierro, como un acto de lamento. Asimismo, no está permitido sacrificar un animal ante la tumba o ante el muerto o en el momento de la salida del muerto de la casa. de conformidad con
lo recopilado por
Ahmad y
Abu Dawud
en el Hadith narrado por
Anas
-que Allah esté complacido con él- que el Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- dijo:
No se permite en el Islam sacrificar al animal golpeándole las piernas con la espada.
(
Número del tomo 2;
Página 35) Segundo: Si un musulmán contradice un veredicto establecido por un texto claro del Corán o de la Sunna y que no admite Al-Igtihad (Esfuerzo en deducir conclusiones de los textos de la Shari‘ah en base de un conocimiento sólido), o si contradice un consenso unánime tajante y establecido, se le explica el veredicto legal justo. Si acepta, pues Agradecido sea Allah; pero si niega y se obstina en modificar la Ley de Allah, después de haberle aclarado el argumento, se le considera incrédulo y se le trata como un apóstata que salió del Islam. Un ejemplo de ello es el que niega las cinco oraciones o una de ellas o la obligación del ayuno, del azaque o de la peregrinación, o que interpreta lo que es probado por el Corán y la Sunna y que no toma en cuenta un consenso unánime de la Ummah (Nación Islámica). En cambio, si contradice un veredicto establecido por una prueba sujeta a una divergencia o susceptible de ser interpretada de varios modos o de ser sometida a varias reglas opuestas, entonces su divergencia está vinculada a una cuestión sujeta a "Al-igtihad", por lo que no se le considera incrédulo. En este sentido se excusa a quien comete error y se recompensa por su esfuerzo de comprensión. En cuanto al que lo juzgó justo, será doblemente recompensado: una por su esfuerzo de comprensión "Al-Igtihad" y otra por la exactitud de su veredicto. un ejemplo de ello es el que niega la obligación de la lectura de la sura de Al-Fatiha para el que reza detrás de un imán frente al otro que dice que esto es obligatorio, y el que diverge en el veredicto de la preparación de la comida por la familia de un difunto reuniendo a la gente para comerla, diciendo que esto es recomendable o dijo que esto está permitido o reprensible que no llega a ser prohibido. En este caso, no está permitido declarar que el autor de estas palabras es incrédulo, ni negar rezar detrás de él y tampoco prohibir contraerle lazos matrimoniales o comer los animales que sacrifica; pero incumbe darle consejos y recordarle a la luz de las pruebas legales, porque es un correligionario musulmán que tiene los derechos de los musulmanes. La divergencia en este asunto está en un problema secundario sometido al esfuerzo de Al-Igtihad. Casos semejantes tuvieron lugar en la época de los Compañeros -que Allah esté complacido con ellos- y los Imames de los piadosos predecesores, pero ninguno juzgaba al otro como incrédulo y no se rompían los lazos entre sí. ¡Que Allah nos conceda el éxito! ¡Que Allah bendiga a nuestro profeta Muhammad, su Familia y sus Compañeros!