Pregunta: Un joven estudió hasta que se convirtió en uno de los más grandes ulemas. Luego, al oír que el contrato de matrimonio de sus padres, concluyó con la oración de Al-Fatih (Recuerdo de la cofradía Tijaní) que dice: "¡Oh Allah! Envía tus bendiciones sobre Muhammad Al-Fatih (el abridor) de lo que se cierra, el Sello de lo que le precedió y el que apoyaba a la verdad con la verdad", reunió a los ulemas para corregir la situación de inmediato. Entonces, ¿se considera este hombre el hijo de su padre, si bien este matrimonio fue concluido por ignorancia o
de acuerdo con la cofradía Tijaní (una secta desviada sufi que abraza creencias extrañas lejos del Islam)
que nos llegó a través de
Ahmad Al-Tigani?
Por favor, aconséjennos acerca de este grave problema, mencionando las pruebas e imprimiendo las respuestas en papel para resolver de manera clara este problema. Finalmente, me gustaría recibir una respuesta antes del comienzo del mes que viene. Allah es el Único que nos guía y nos conduce al camino correcto. Pido a Allah que nos haga entrar en el Paraíso con Su misericordia y generosidad. Él atiende a todas las oraciones. La paz y la misericordia de Allah sean con ustedes.
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Número del tomo 18;
Página 100)
Respuesta: Recitar la oración de Al-Fatih al concluir un contrato de matrimonio, no anula el contrato; aunque se recomienda pronunciar un discurso antes de concluirlo, a pesar de que no sea una de las condiciones del matrimonio. Este discurso es el sermón o discurso de necesidad que fue transmitido de manera auténtica por
Ibn Mas‘ud
-que Allah esté complacido con él- quien dijo:
El Mensajero de Allah -la paz y las bendiciones sean con él- nos enseñó el sermón de necesidad, el cual consiste en recitar: "Alabado sea Allah, le damos gracias, buscamos Su ayuda, pedimos Su perdón y buscamos refugio en Él de los males de nuestras almas. Aquellos a quienes Allah guía, no hay nadie que podrá desviarlos, y aquellos a quienes Allah extravía, no hay nadie que podrá guiarlos. Doy testimonio de que nada ni nadie merece ser adorado sino Allah, y que Muhammad es Su siervo y Su Mensajero.
¡Vosotros que creéis! Temed a Allah como debe ser temido y no muráis sin estar sometidos
¡Hombres! Temed a vuestro Señor que os creó a partir de un solo ser, creando de él a su pareja y generando a partir de ambos muchos hombres y mujeres. Y temed a Allah, por Quien os pedís unos a otros, y respetad los lazos de sangre. Realmente Allah os está observando
¡Vosotros que creéis! Temed a Allah y hablad acertadamente(70)Él hará buenas vuestras acciones y os perdonará las faltas. Y quien obedece a Allah y a Su mensajero ha triunfado con gran éxito
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Número del tomo 18;
Página 101) ¡Que Allah nos conceda el éxito!¡Que Allah bendiga a nuestro profeta Muhammad, su Familia y sus Compañeros!