Cohabitó con su esposa durante el día en Ramadán por ignorancia religiosa

( Número del tomo 9; Página 236)  Pregunta 1: Me casé muy joven y sin estudiar. Mi marido solía cohabitar conmigo durante el día en Ramadán con mi consentimiento ya que ninguno de los dos conocíamos la pena de cometer este acto. Ahora, él está muerto y yo no conozco el número de días en que lo hicimos. ¿Qué debo hacer en este caso?

Respuesta 1: Tiene la obligación de dar una expiación por cada día de Ramadán, en el que sucedió la cohabitación. Esa expiación consiste en poner en libertad a un esclavo creyente. Si no es posible hacerlo, tiene que ayunar dos meses consecutivos (60 días) y, si tampoco es posible, debe alimentar a sesenta necesitados por cada día. Si no recuerda el número de estos días, puede calcularlo según su estimación. Lo mismo debe hacer por su difunto marido, pues si ha dejado una herencia, se debe dar de ella esa expiación. Además, si un familiar suyo o incluso cualquier musulmán, quiere ayunar en su nombre, será un acto bueno, porque el Profeta -la paz y las bendiciones de Allah sean con él- dice: Quien muera teniendo algún ayuno obligatorio pendiente, que lo haga por él su pariente más cercano. Es un Hadîz de común acuerdo sobre su autenticidad. Si no hay nadie que ayune en su nombre y no hay esclavos musulmanes para ponerlos en libertad, se debe sacar de su herencia una parte para alimentar a sesenta necesitados, recibiendo cada uno de ellos medio de sa´ (1.5 Kg. aproximadamente) de la comida común de su localidad, como arroz o similar, por cada día en el que cohabitó contigo. Pero, si no hay ninguna herencia, uno de sus parientes o incluso un musulmán bienhechor puede donar esa alimentación por el difunto y será eso un acto de bien. Por otro lado, debe compensar esos días de coito con su marido, y además, dar la expiación de alimentar a un pobre por cada día, la cantidad de medio sa' de la comida común de su localidad. Lo mismo se aplica a su marido fallecido, se debe compensar esos días en su nombre y alimentar a los necesitados por haberse retrasado en hacerlo. ( Número del tomo 9; Página 237)  ¡Que Allah nos conceda el éxito! ¡Que Allah bendiga a nuestro profeta Muhammad, su Familia y sus Compañeros!